VIAJAR EN COCHE

VIAJAR CON UN BEBÉ 

Viajar en coche a veces puede llegar a ser una tortura, hay bebés que odian el coche, nosotros nos incluimos en el grupo de padres que han hecho mil triquiñuelas para que nuestra pequeña no llorara en el coche, sin ningún resultado, claro está.

Lo ideal para los niños que lloran en el coche sería evitarlo lo máximo posible, en estos casos hacer uso de los transportes públicos sería la solución más sencilla así ayudamos al medio ambiente y evitamos el sufrimiento de nuestro bebé, para nosotros esto es inviable ya que por la zona en la que vivimos es imposible no hacer uso del coche diariamente, no tenemos servicios de autobús  o tren cerca y para ir a trabajar o a comprar es necesario, para familias que se encuentren en la misma situación que nosotros donde no queda otra que coger el coche sí o sí, cada día, puede que os sirva nuestra experiencia.

Después de intentar mil romerías hemos llegado a la conclusión de que la forma más respetuosa y mejor para nosotros es viajar aprovechando las horas de sueño. Cuando hacemos algún plan que conlleve salir en coche esperamos a que coincida con más o menos la hora en la que ella suele dormirse, nuestra niña sigue unos patrones claros de sueño, siesta mañanera sobre las 11, siesta de la tarde sobre las 3, en cuanto se acerca la hora de la siesta nos montamos en el coche, hay días que ni hemos rodado 500 mts y ya está dormida.

Llevamos siempre un pijama por si acaso se complica el día o nos apetece quedarnos hasta más tarde, si queremos volver a casa y la siesta de la tarde ya ha pasado esperamos hasta la hora cuando más o menos se duerme de noche, sobre las 20:00, le ponemos el pijama y al coche, de esta forma se duerme y cuando llegamos la pongo al pecho y va medio dormida a la cama.

Lo que tengo comprobado es que si se duerme e intento pasarla a la silla del coche siempre se despierta y ya va protestando y llorando hasta que llegamos a casa, por lo que hacemos todo lo posible por colocarla en la silla antes de que llegue a dormirse.

Otra cosa que hemos comprobado es que se duerme más fácil si va sola, si yo me siento atrás con ella le cuesta mucho más conciliar el sueño y generalmente protesta y alarga la mano como pidiendo auxilio para que la saque, si voy delante y vamos hablando enseguida se duerme. Cuando vamos las dos solas,  mientras conduzco, muchas veces le voy cantando o hablando, parece ser que le relaja.

Para viajes más largos os recomendaría esperar a que fuese más mayor y si no queda otra lo mismo, aprovechar el sueño, aunque ya sería un poco más complicado ya que no debería de estar más de dos horas en el grupo 0 / 0+.

Al final respetar los ritmos del bebé siempre es lo más acertado, guíate por tu pequeño y recuerda que la prioridad es él, lo demás siempre puede esperar.

Lo que no debéis hacer bajo ningún concepto mientras estáis en marcha es sacar al bebé de la sillita o hacer de contorsionista y amamantarlo, estas prácticas son muy peligrosas y en caso de impacto podéis poner en serio peligro la vida de vuestro bebé, todas sabemos que pasa si el bebé está fuera de la silla, si lo intentas amamantar sin sacarlo puedes literalmente ahogarlo en caso de impacto, me consta que hay mamas que por desesperación lo hacen o lo han hecho alguna vez y de verdad que es realmente peligroso.

También hay sillas de retención infantil que no son nada recomendables en cuanto a confort y seguridad, pero de eso os hablaré en otro post. ;-)

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Un beso a todos y feliz juernes!